Desgraciadamente la violencia en la
pareja sigue estando presente en nuestra sociedad y la cantidad de
personas afectas, siendo en su gran mayoría mujeres, se tiene que
enfrentar día con día a ella.
Por esta razón me parece importante que no solamente nos enfoquemos en brindar soluciones cuando la
violencia está presente y ya ha causado algún tipo de daño físico
o psicológico...
Sino que también es necesario aprender a
tomar medidas preventivas para reducir en la medida de lo posible
el número de casos de violencia.
Antes
de darte a conocer las 10 claves para prevenir la violencia en la
pareja, es necesario que sepas lo siguiente:
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¿Qué es la violencia de pareja?
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¿Qué es la violencia de pareja situacional?
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La violencia de pareja, ¿se da más en el matrimonio o en el noviazgo?
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¿Cómo prevenir la violencia de pareja?
¿Qué es la violencia en la pareja?
Cuando hablamos de violencia en la
pareja nos referimos al abuso físico, emocional y/o verbal que se
lleva a cabo de pareja de un miembro de la pareja al otro.
Este tipo de comportamiento abusivo
tiene como objetivo tener el control total de la otra persona y de la
relación en sí misma.
Según la Dra. Eila Perkis de la
Universidad de Haifa, llegó a la conclusión de que la violencia de
pareja es el resultado de un proceso planeado y sumamente calculado.
Lo contrario a lo que podría pensarse
o lo que manifiestan los maltratadores en la relación argumentando
que “han perdido el control”, pero, ¿por qué no pierde el
control con su jefe, sus amigos o compañeros de trabajo?
La violencia en una relación puede
aparecer sin importar la orientación sexual,
el nivel socioeconómico, el género, la raza, la edad la religión.
Por mencionar algunas cifras en cuanto
a la aparición de la violencia en la pareja, me voy a basar en un
estudio realizado por la OMS, el cual se centró únicamente en la
violencia ejercida hacia la mujer de parte de su pareja.
Por hacer un breve resumen y
mantenernos mejor informados acerca de la importancia de este tema en
la sociedad, este estudio arrojó los siguientes resultados:
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Entre el 15% y el 71% de las mujeres que han tenido pareja, han sufrido de algún tipo de violencia por parte de ella o a lo largo de su vida.
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Las mujeres japonesas son las que menos han sufrido de algún tipo de violencia por parte de su pareja, sin embargo aproximadamente en 15% de ellas declaró haber sufrido algún tipo de violencia en algún momento de su vida.
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El mayor número de casos de violencia en la pareja se encontró en países como Etiopía, Bangladesh, Perú y Tanzania (en las zonas rurales en su mayoría).
¿Qué
es la violencia de pareja situacional?
Este término
hacia referencia a aquellas situaciones en donde se presenta la
violencia de pareja en determinados momentos o situaciones
específicas.
Ocurre cuando la
pareja o uno de los miembros no sabe hacer frente a una situación determinada y de un momento a otro pierde el control reaccionando con
violencia.
Esto puede
ocurrir, por ejemplo cuando la pareja se encuentra en medio de una
fuerte discusión y como uno o ambos en lugar de tratar de
solucionarla se alteran cada vez más, alguno de los 2 puede llegar a
decir o a hacer algo de lo que después se puede arrepentir.
Esto no
sucedería si uno o ambos tuvieran una mejor gestión de sus
emociones y aprendieran a controlar sus impulsos y a pensar con mejor
claridad en esos momentos.
Existen muchos
casos de personas que tienen un pobre control de sus impulsos y
cuando discuten con alguien, sobre todo a quien le tienen más
confianza y son más cercanos, como con la pareja, tienden a aventar
algún objeto o a golpearse a ellos mismos.
Sin embargo, en
este caso, la persona en lugar de reaccionar de esa manera y hacerse
daño a el(ella) mismo(a), lo que hace es en contra de la pareja.
Generalmente,
este tipo de violencia no se repite ya que se trata muchas veces de
casos aislados y la persona tienden a corregir ese tipo de reacción,
por lo menos no volviendo a actuar en contra de la pareja.
Sin embargo, hay
parejas que la experimentan con más frecuencia y esto sin duda, con
el tiempo puede llevarlos a tener un aumento de los casos de
violencia y por supuesto pueden terminar muy mal.
Cabe mencionar
como dato importante que este tipo de violencia no solo puede
presentarse en la pareja, sino que suele también aparecer entre
padres e hijos.
La violencia de pareja, ¿se da más en el matrimonio o en el noviazgo?
Como sabemos, conocer algún caso de
violencia en la pareja es bastante común, sobre todo porque cada vez
estamos más informados y las personas que la sufren se atreven más
a declarar estos casos.
Según la OMS, la violencia no solo se
presenta en el caso de los matrimonios ya que muchas mujeres que son
maltratadas en el matrimonio también han sido maltratadas durante el
noviazgo.
También menciona que 3 de cada 10
adolescentes han denunciado por haber sufrido violencia en el
noviazgo.
Por otro lado, los Investigadores de
la Universidad de Pensilvania, han descubierto que más del 80% de
los casos de violencia doméstica que fueron denunciados en
Filadelfia, se llevaron a cabo entre parejas que no estaban casadas.
No sabemos con certeza si la violencia
se presente con la misma frecuencia en parejas casadas o no, sin
embargo, puede ser que en algunos casos debido a esta situación la
pareja no decida casarse pero sin embargo la relación continúe
siendo violenta.
Por esta y muchas más razones, es
importante que, en este caso las mujeres, quienes son las más
afectadas, aunque también podría aplicar para los hombres, aprendan
a tomar medidas de prevención y evitar que comience a ejercerse la
violencia en la pareja.
Por supuesto, en el caso de que se
tomen las medidas necesarias y la pareja pretenda ejercer igualmente
la violencia, el adoptar estas medidas podría ayudar a la persona
afectada a alejarse del maltratador.
¿Cómo prevenir la violencia de pareja?
Es
importante conocer cuales son nuestros derechos en las relaciones
para aprender a poner límites a los demás cuando la situación lo
requiera.
Estos
son algunos consejos que pueden serte útiles para prevenir que surja
alguna situación de violencia física y/o verbal en la pareja y
tener una relación más sana.
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Si te sientes maltratado(a), díselo a tu pareja. Desde el primer momento en el que te sientas maltratado(a) o dominado(a), tienes que hacérselo saber a tu pareja. No dejes que pase el tiempo pensando en que eso que ha dicho o hecho fue sin quererlo o que seguro para la próxima no va a actuar de esa manera.
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Ponle un alto a tu pareja. Si tu pareja comienza a ofenderte, ponle un alto de inmediato. No es necesario que utilices para ello la violencia, simplemente háblale de manera clara y segura. Por ejemplo, puedes utilizar frases como: “no me hables así que no me gusta”, “no me hables de esa manera, respétame”, etc. Lo importante es que se lo digas con seguridad y de manera seria.
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No caigas en su juego. Es muy importante que no caigas en su juego ya que muchas veces la otra persona puede intentar provocarte ya sea gritándote o hablándote de manera ofensiva. Evita hacer lo mimo y hazle saber que no te gusta que te hablen así, si continúa haciéndolo, es mejor que te retires.
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Aprende a resolver conflictos de forma pacífica. Cada vez que tengan algún problema, es necesario resolverlo de la forma más tranquila posible por medio del diálogo y la negociación.
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Date a respetar. Es esencial que te des siempre a respetar, así mismo que respetes también a tu pareja. Una vez que se comienzan a faltar al respeto pueden entrar en un círculo vicioso en el que cada vez existan menos límites.
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Respeten sus diferencias. Si surge algún conflicto debido a que cada quien desea algo distinto, aprendan a tomar decisiones en donde exista un equilibrio entre lo que ambos desean. A veces uno tiene que ceder pero siempre equitativamente.
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Espacio personal. Reserven un tiempo para que ambos convivan también con su familia y amigos. Ese tiempo, al igual que el tiempo que se pasa con la pareja es sumamente valioso y es algo que ambos tiene que respetar.
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Adiós al control. No permitas que tu pareja te controle ni trates de controlar a tu pareja. Recuerda que el control no es amor y que si quieres mantener una sana relación esto es necesario que se respete.
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No actúes por impulso. Cuando estás enfadado(a) puedes decir o hacer cosas que en realidad no sientes y que son propias de tu enojo. Es mejor que esperes a hablar con el(ella) cuando te hayas tranquilizado por lo menos un poco.
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Nunca dejes de ser tu mismo(a). Tu pareja debe de aceptarte y respetarte tal y como eres y tu a ella. Alguien que te prohíbe ser tu mismo(a) y te limita no te ama.
Por
último, pero no menos importante, mencionarte que si te encuentras
en una relación violenta en la que tu pareja te esté maltratando de
la manera que sea, lo mejor que puedes hacer es alejarte y terminar
con esa relación lo antes posible.
Por
favor, ¡NO permitas que el maltrato se siga prolongando! Si lo
permites, cada vez se te va a ser más difícil salir de esa relación
que cada vez te hará más daño.
Si te ha sido útil esta información,
te invito a que la compartas, nunca sabes a quien puedes ayudar y
sobre todo en estos casos tan delicados en donde la vida de una
persona puede llegar a correr peligro. ¡Todos podemos contribuir
para evitarlo!
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