Una de las cosas que nos impiden ser felices es el NO conocernos a nosotros mismos. Esta es la razón por la cual decidí escribir estas 40 preguntas para conocerse a uno mismo, para brindarnos un espacio personal para la reflexión y el autodescubrimiento.
Tiene mucho sentido porque al ser la felicidad algo subjetivo, ya que cada persona la percibe y la vive de forma distinta, ¿cómo vamos a querer alcanzarla sin saber lo que deseamos alcanzar exactamente?
Sin duda, más que pretender alcanzar
nuestras metas y propósitos en la vida, lo más importante para tener
una vida con sentido y por lo que todos deberíamos comenzar es
conocernos a nosotros mismos.
Preguntas para conocerse
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¿Qué es lo que te gustaría lograr conociéndote más a ti mismo(a)?Identifica por lo menos 2 razones en concreto por las cuales estás decidido(a) a contestar estas preguntas para conocerte mejor.
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Para ti, ¿cuál es la parte más difícil de conocerse a uno mismo?, ¿hay algo que te de miedo descubrir?
Responder
esta pregunta comenzará brindándote más información acerca de ti,
si muestras alguna resistencia a la hora de pretender conocerte a ti
mismo(a) y si es así, a que se debe que la tengas.
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Imagina que tienes enfrente de ti a una especie de sabio que te va a dar un consejo acerca de algo que te está preocupando estos días o que te tiene preocupado desde hace tiempo, ¿qué consejo te daría?
Sal
un momento de ti mismo e imagina realmente que tienes la oportunidad
de ser aconsejado por un sabio, ¿qué te diría?
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Como sabes, todos nos vamos a morir algún día y tenemos un tiempo limitado aquí en la tierra, ¿qué harías si te fueras a morir mañana?, ¿seguirías preocupado por lo que hoy te angustia?, ¿qué cosas podrías quitar o agregar a tu rutina diaria?
Muchas
veces no nos ponemos a pensar en lo efímera que es la vida, vivímos
como si fuéramos a vivir para siempre desperdiciando los días sin
sentido.
Ya
que tenemos la oportunidad de estar ahí, ¿por qué no la
aprovechamos mejor?, ¿qué nos limita a sentirnos felices el día
de hoy?, ¿cómo podemos disfutar cada día al máximo?, ¿de qué
sirve tanta preocupación?, ¿qué podemos hacer por vivir mejor
hoy?
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¿Estoy haciendo cosas en mi vida cotidiana para favorecer mi bienestar físico, mental y espiritual?, ¿cuáles son?
Identifica
cada una de ellas, ¿te falta trabajar más con alguna?, ¿cuáles
estás descuidando?, ¿cómo podrías equilibrarlas?
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¿Qué es lo que NO quieres en tu vida?Cuando no sabemos que es lo que queremos en la vida, la pregunta que podríamos comenzar a plantearnos es que es lo NO queremos en ella.
Es
recomendable hacer una lista de lo que NO queremos en la vida para
ser conscientes realmente que es lo que tenemos que empezar a
descartar para acercarnos a lo que realmente deseamos.
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¿Qué parte de lo que estás haciendo ahora NO te va a llevar a tener la vida que deseas?
Todo
lo que hoy siembras es lo que vas a recoger mañana, ¿qué has
estado sembrado hasta ahora que no te gustaría recoger el día de
mañana?
Puede
ser que estés generando antigüedad en un trabajo que no te gusta,
que estés en una mala relación, que sigas desarrollando un mal
hábito, que albergues pensamientos negativos, etc.
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¿Qué es lo que estás sembrando hoy que te gustaría recoger el día de mañana?
Todas
las personas estamos sembrando algo todos los días, ya sea porque
estemos estudiando y finalmente queremos llegar a graduarnos, que
estemos metidos en un proyecto y queramos obtener buenos resultados
el día de mañana, etc.
Aunque
no solo eso, también hay otras cosas que podemos estar sembrando de
las que no somos conscientes, como por ejemplo, un mal hábito, una
actitud que luego se puede convertir en parte del carácter,
etc.
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¿Qué es lo peor que podría pasar si te atreves a salir de tu zona de confort?
Detente
a pensarlo con calma y reflexiona bien la respuesta, no te quedes
únicamente en lo superficial.
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¿Qué pasaría si te sucediera lo peor que te puedes imaginar al salir de tu zona de confort?, ¿de qué manera lo afrontarías?, ¿qué opciones tendrías para superarlo?
Trata
de pensar todo esto de manera objetiva sin dejarte llevar por tus
emociones pasajeras.
Date
cuenta también de la perspectiva con la que ves las cosas, ¿estás
siendo más optimista o pesimista?, ¿estás siendo flexible a la
hora de encontrar otras opciones?
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Después de haberlo superado y seguir adelante, ¿te sentirías mejor o peor de lo que te sientes ahora?
Date
cuenta de la manera en la que te podrías llegar a sentir si
superaras la adversidad y salieras de tu zona de confort. ¿Cómo te
sentirías?, ¿valdría la pena el esfuerzo?
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Si le preguntaran a tu mejor amigo(a) o a la persona que más te conoce, quien eres tu, ¿de qué manera te describiría?
Como
en todas las preguntas anteriores, tómate unos momentos para
contestarla, trata de ser lo más objetivo posible y de imaginarte:
¿qué es lo que diría esa persona de ti?
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¿En qué momentos dejas de respetarte a ti mismo(a)?
Hay
ocasiones en las que incluso sin darnos cuenta podemos estarnos
faltando el respeto a nosotros mismos.
Con
esto me refiero a que podemos estar “obligándonos” a hacer
cosas que no queremos y actuando en contra de nuestra propia
voluntad por complacer a otros o
por cumplir con ciertos estándares sociales.
Por
lo que es interesante cuestionarnos acerca de las
cosas
que hacemos cada día y darnos cuenta que tanto las hacemos porque
realmente lo deseamos y que tanto las hacemos para cumplir con
ciertas
expectativas o complacer a otros.
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¿Cuáles son tus defectos y virtudes? Nombra por lo menos 5 de cada uno de ellos.
Para
conocerse a uno mismo y tener una autoestima sana, es necesario que
reconozcamos cuales son nuestros propios defectos y virtudes.
Todos
tenemos ambos, la persona que solo reconoce unos y no otros, no se
conoce a sí misma.
De
hecho una sana autoestima radica en reconocer ambas cosas y no
únicamente las virtudes. También es
bueno
identificar aquellas cosas que podemos mejorar, tanto defectos como
virtudes.
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¿Qué es lo que me haría ser mejor persona que ayer?, ¿qué concepto tengo acerca de lo que es una buena persona?
¿Te
consideras una buena persona?, ¿qué es lo que hace buena a una
persona?, ¿de qué manera actúa una buena persona?
En
muchas ocasiones tenemos una idea un tanto equivocada acerca de lo
que es una buena persona y al pretender actuar como lo haría una
buena persona, nos alejamos más de nosotros mismos.
Por
ejemplo, a veces tenemos la creencia de que una buena persona es la
que nunca se queja de nada, que todo lo acepta, todo lo perdona, que
pone antes la felicidad del otro que la propia, etc.
Y
cuando se quiere actuar en consecuencia no nos damos cuenta de que
nos estamos faltando al respeto a nosotros mismos y de hecho eso nos
hace estar más lejos de ser una buena persona.
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¿Mis acciones son llevadas por el amor o por el miedo?
¿Eres
consciente de que es lo que te está moviendo cada día?, ¿en base
a que tomas tus decisiones?, ¿estás tomando las decisiones que
quieres realmente?
Haz
una lista de tus acciones y anota al lado de cada una de ellas si
las estás haciendo por amor y porque estas realmente convencido(a)
de ello o por miedo.
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¿Estoy siguiendo a la multitud o estoy siguiendo a mi propia intuición?
Trata
de identificar aquellas cosas que estas haciendo por tratar de
adaptarte a lo que hace la mayoría de la gente y porque tienes la
creencia de que “así es la vida”.
Por
otro lado también identifica aquellas que haces por tu propia
voluntad, porque tu intuición de lo dice y es lo que tienes ganas
de hacer.
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¿En qué se basa tu felicidad hoy?
Cierra
los ojos y retrocede algunos años, ¿recuerdas como era tu
infancia?, ¿tu adolescencia?, ¿qué te hacía feliz en esos
momentos?, ¿qué momentos eran los que más disfrutabas?, ¿los
identificas?
Una
vez que los hayas identificado, pregúntate, ¿qué momentos te hacen
feliz hoy?, ¿han cambiado tus prioridades?, ¿a qué le das más
importancia?, ¿por qué?, ¿necesitas eso realmente para ser feliz?
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¿Cuántas veces a la semana te regalas felicidad a ti mismo(a)?
Siempre
vamos a tener actividades que nos hacen sentirnos más tranquilos y
felices.
Puede
ser cualquier cosa, como ir al cine, salir con los amigos, ir a
hacer un deporte, hacer ejercicio, comer tu comida favorita, leer,
tocar un instrumento musical, salir a caminar, etc.
La
pregunta sería, ¿cuántas veces a la semana haces por lo menos 1
de esas cosas que disfrutas?, ¿cuándo
fue la última vez que hiciste algo para ti?
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¿Cuál es tu lado más oscuro?
A
pesar de ser una pregunta un tanto complicada, ya que muchas veces
no somos conscientes de aquello que no queremos aceptar que está en
nosotros mismos.
Podemos
llegar a reconocerlo profundizando en lo que más criticamos de los
demás, cuando nos descubrimos haciendo cosas que en realidad “no
queríamos”, etc.
¿Sabes
que es?, ¿qué es lo primero que se te vino a la mente cuando
estabas leyendo estas líneas?, ¿
por qué te cuesta tanto aceptarlo?
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¿Qué es lo que más agradeces a la vida?
Todos
tenemos cosas que agradecer, sin embargo no todos somos conscientes de ellas.
Toma
conciencia de esas pequeñas y grandes cosas que tienes que
agradecer a la vida y enumeralas.
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¿Cuáles son las cosas más importantes para ti en la vida?
¿Qué
es lo que más valoras realmente en la vida?, ¿por qué? Haz
conciencia de todo aquello que
es
importante para ti, que realmente tiene un valor y puede darte un
sentido de vida.
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¿Cuáles son las cosas más grandes que has aprendido hasta el día de hoy?
Piensa
en todas aquellas enseñanzas que te ha ido dejando la vida misma,
¿cuáles son? Identifica cada de una de ellas.
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¿Qué tan importante es para ti tu salud mental?
Me
parece interesante que te hagas esta pregunta con seriedad a ti
mismo(a) y te des cuenta realmente en que lugar estas dejando tu
salud mental y por lo tanto tu bienestar emocional.
Recuerda
que el tener un buen equilibrio entre la salud física y mental es
esencial cuando se quiere vivir una vida más tranquila y feliz.
Si
dejas de lado tu salud física, ¿cómo puedes pretender no
enfermarte y sentirte bien? Si dejas de lado tu salud mental, ¿cómo
quieres ser feliz?
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Si tuvieras que hacer algo gratis por el resto de tu vida, ¿qué te gustaría hacer?
¿Qué
cosas no te cuesta nada hacerlas?, ¿qué es lo que harías o haces
con gusto y sin que te paguen?
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¿Qué estarías haciendo si tus problemas desaparecieran?
Imagina
que de la noche a la mañana tus problemas han desaparecido, ¿qué
harías?, ¿cómo te sentirías?, ¿con
quienes estarías?
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¿Cuál es tu película favorita de la niñez?
Haz
una pequeña reflexión y trata de identificar que parte de tu vida
actual está teniendo una relación ahora mismo con ella.
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¿Cuál es o cuales son tus mayores secretos?
Piensa
en aquellas cosas que jamás le contarías a nadie, ¿es una sola
cosa?, ¿son muchas? Y ahora reflexiona acerca de la razón por la
cual no contarías a nadie ese secreto.
¿Es
algo que te avergüenza?, ¿es algo de lo que te arrepientes?,
¿sientes que te hace ver como una mala persona?, identifica la
verdadera razón por la cual guardas tanto esos secretos.
Esto
no es con la finalidad de que vayas a contarlos a alguien,
simplemente se trata de ayudarte a conocerte mejor por medio de
ellos.
-
¿Te conformas con menos de lo que vales?, ¿por qué?
Todos
valemos mucho únicamente por el hecho de ser personas únicas e
irrepetibles. Es una obligación conocer nuestro valor y
respetarnos.
Sin
embargo, muchas veces caemos en este tipo de trampas en donde
comenzamos a conformarnos con poco y no nos damos cuenta de que
realmente merecemos mucho más.
Con
“poco” me refiero a aquellas situaciones en donde aguantamos por
ejemplo que otras personas nos maltraten, aceptamos trabajos que no
van con nosotros y nos hacen infelices, nos quedamos estancados en
una zona de confort llena de incomodidad e insatisfacción, etc.
¿Qué
es lo que te hace quedarte ahí?, ¿cuál es la verdadera razón por
la que lo permites?
-
¿Donde estás viviendo ahora mismo: pasado, futuro o presente?
Tómate
unos minutos para analizar y darte cuenta en donde está tu mente
ahora mismo y en donde sueles tenerla normalmente.
¿Estás
viviendo realmente lo que más importa que es el momento presente o
vives la mayor parte del tiempo preocupado en cosas que ya
ocurrieron o que no sabes si van a ocurrir?
-
¿En qué momento se rompe esa coherencia entre lo que haces y lo que sientes?
Sabemos
que vamos por el buen camino cuando lo que sentimos y lo que hacemos
están en sintonía.
Es
decir, cuando estamos actuando realmente conforme nuestra manera de
pensar y sentir.
¿En
qué momento eso que haces tiene relación con lo que sientes?,
¿cuales son las acciones que llevas a cabo que no tienen coherencia
con tu manera de sentir y pensar pero que sin embargo las haces?
-
¿Qué te define?
¿Puedes
describir quien consideras que eres tu realmente como persona?,
¿cómo lo harías? Recuerda que lo que te define no es lo que haces
ni lo que tienes así
que trata
de encontrar una manera creativa y profunda de describirte.
-
Para ti, ¿cuál es el significado de la vida?
¿Te
has preguntado porque estás aquí?, ¿qué sentido tiene la vida?,
¿qué significa para ti el paso por este mundo?
-
¿Qué partes de tu vida NO reflejan lo que eres?
Trata
de hacer conciencia de aquellas acciones de tu vida que estás
llevando a cabo y que realmente no tienen nada que ver con la
persona que eres.
Después
puedes preguntarte: ¿para qué las estoy haciendo?, ¿qué
finalidad tienen en mi vida?
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¿Cómo percibes el fracaso?
¿Qué
significa para ti fracasar?, ¿cómo vives el fracaso?, ¿crees que
se puede encontrar algo positivo en
el
fracaso?
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¿Qué es para ti el éxito?
Para
ti, ¿quién es una persona exitosa?, ¿en qué se basa tu concepto
de éxito?, ¿cómo describirías a una persona exitosa?
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Si ves que haciendo lo mismo obtienes el mismo resultado, ¿qué te hace seguir insistiendo una y otra vez?
Sin
duda es una pregunta que puede resultar muy difícil de contestar,
pero el hacerlo te brindará más pistas acerca de la manera en la
que tus creencias te pueden estar limitando.
Además,
al
reconocerlas podrás tener más clara la manera en la que puedes
cambiarlas a mejor.
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¿En qué ocasiones te sientes más motivado(a)?
Identifica
cuales son esos días o momentos en los que te sientes más
motivado(a), ilusionado(a) con algo.
Se consciente de cada uno de esos momentos en los que tu misma emoción
te puede quitar el sueño.
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¿Serías amigo(a) de ti mismo(a)?, ¿por qué?
¿Podrías
ser amigo(a) de alguien como tu?, ¿en qué aspectos te agradaría
tu propia compañía?, ¿qué es lo que más te agradaría de ese
amigo(a) (tu mismo)?, ¿qué es lo que podrías mejorar para que
tengan una mejor relación?
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¿Me quiero tanto como espero que los demás me quieran?
¿Qué
tanto te quieres a ti mismo?, ¿te aceptas tal y como eres?, ¿cuidas realmente de ti como quisieras que otro lo hiciera?, ¿te valoras
tanto como quisieras que otro te valorara?
Espero
que estas preguntas hayan logrado su objetivo y aunque conocerse a
uno mismo es un proceso muy largo, sobre todo porque todo el tiempo
estamos viviendo nuevas experiencias que hacen que nuestra
perspectiva acerca de la vida cambie...
Siempre
podemos hacer pequeñas cosas que pueden ir brindándonos pistas
acerca de quienes somos y hacia donde queremos dirigirnos.
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