¿Has escuchado alguna vez la frase:
un clavo saca a otro clavo? Esto es exactamente a lo que nos referimos cuando hablamos de las relaciones liana en donde tras la ruptura
de pareja en poco tiempo se sustituye a esta por otra nueva.
Hay personas que eligen tener con
frecuencia este tipo de relaciones en donde suelen saltar de una
pareja a otra sin problemas aparentes. Y es que tienen la sensación
de que realmente no son capaces de pasar incluso un periodo corto de
tiempo solas.
Pero, ¿cuáles son las razones por
las que esto ocurre?, ¿por qué tienen algunas personas esa constante
necesidad de estar con una pareja? A continuación te daré a conocer
todo lo que necesitas saber acerca de las relaciones liana.
Qué
son las relaciones liana
Las
relaciones liana son aquellas que comienzan justo después de una
ruptura de pareja y tienen la finalidad de llenar ese espacio vacío
que dejó la pareja anterior sustituyéndola por una nueva.
Existen personas que tienden más a
experimentar este tipo de relaciones y que incluso si se les pregunta
cuando fue la última vez que estuvieron solteras realmente no lo
recuerdan.
Llevan mucho tiempo tomando la
decisión de empezar una relación al poco tiempo de haber terminado otra que ellas
mismas reconocen que no saben actuar de otra manera y que no se
sienten capaces de pasar mucho tiempo sin tener una pareja a su lado.
Un aspecto importante a resaltar en
este caso es que las personas que tienen relaciones liana cada vez
pierden más la capacidad para estar con ellas mismas y por lo
contrario, cuanto menos tiempo pasan solas más aumenta su necesidad
de estar en pareja.
Esto sin duda se vuelve una especie de
adicción para muchas personas y suelen caer en ese círculo vicioso
ya que al no darse el tiempo suficiente para ellas mismas y para
elegir a la persona con la que quieren estar, terminan eligiendo a la
primera persona que se les atreviese.
Lo cual por supuesto aumenta las
probabilidades de que la relación fracase y que por lo tanto la
ruptura se produzca poco tiempo después de haber comenzado.
Por
qué se producen las relaciones liana
Existen varias razones por las cuales
una persona puede comenzar a tener este tipo de relaciones y volverse
adicta a ellas. Entre las principales se encuentran las siguientes:
-
Miedo a estar solo(a): Esta es una de las principales causas de que una persona comience a elegir tener este tipo de relaciones. Y es que el miedo a estar solo es sin duda una de las situaciones más temidas por las personas.
En
este caso, este temor se encuentra muy arraigado y la persona que
elige este tipo de relaciones no sabe tener un buen equilibrio entre
los momentos de compañía y de soledad.
-
Creencias irracionales acerca del amor: Tener la creencia de que una buena relación tiene que ser lo más parecido a la perfección, que siempre se tiene que pasarlo bien con la pareja, que la pareja debe de cumplir siempre con sus expectativas, que en una buena relación no se tienen problemas, etc.
Cuando
se dan cuenta de que no es así y no viven la relación como
pensaban vivirla, se desilusionan y deciden terminar con ella
para conocer a otra persona que
pueda cumplir con sus expectativas.
Incluso
pueden buscar a otra persona aún estando con la pareja actual, lo
cual facilitaría la transición de una pareja a otra.
-
Se dedican únicamente a la pareja: Invierten todo su tiempo en la relación de pareja y se olvidan de las demás relaciones importantes en su vida.
Esto
puede provocar 2 cosas: que la relación se vuelva
sumamente monótona y terminen aburriéndose de ella o que aumente
cada vez más la dependencia hacia la pareja y que
les cueste
dejarla incluso
a
pesar de pasarlo mal.
Cuando
la relación termina y al darse cuenta de que han dejado otras
relaciones importantes como la familia y los amigos, comienzan a
sentirse solos y deciden volver a cubrir ese sentimiento de soledad
con una nueva pareja.
Consecuencias de no saber estar solo
Pasar de una relación a otra sin
darse tiempo para uno mismo, trae consigo algunas consecuencias.
Entre las principales se encuentran las siguientes:
-
Insatisfacción personal: Provoca que la persona no se sienta a gusto con ella misma porque se siente incapaz de sentirse bien estando sola (sin pareja), por lo que pone todo su bienestar en las manos de otra persona.
Pierde
cada vez más su propia independencia y vive un constante
desequilibrio emocional que provocará que tenga problemas en más
áreas de su vida.
-
Elegir a las personas incorrectas: Debido a la rapidez con la que salta de una pareja a otra y no darse el tiempo suficiente para conocer a la persona o para pasar tiempo con ella misma, termina eligiendo una y otra vez personas que no son las más adecuadas para ella.
Incluso
aún sabiendo que la otra persona es la menos indicada, se preocupan
más por llenar ese vacío emocional que sienten y
por lo menos en ese momento no les importa estar
eligiendo mal.
-
Poco conocimiento de uno mismo: Al no saber estar estar a solas con ellas mismas y evitar los momentos de soledad, se alejan cada vez más de ellas mismas e incluso llegan a dudar de lo que quieren y/o tienden a actuar en “piloto automático” casi todo el tiempo.
Las relaciones liana: conclusión
Independientemente de la motivación
que tenga una persona de pasar de una relación a otra, en todas
ellas aparece esa excesiva necesidad de tener a una pareja a su lado.
Es decir, finalmente todas las
personas que tienen este tipo de relaciones se vuelven dependientes de ellas. Pero más que a las parejas en sí, a la
seguridad que cada una de ellas les proporcionan.
Tal vez por esta razón les resulta
más sencillo terminar con alguien y después continuar su vida al
lado de otra persona, porque como generalmente no duran mucho tiempo
en la relación, nunca llegan a profundizar con ellas y a entregarse
realmente.
Aunque viven la relación con mucha intensidad desde el principio, buscan más que nada tener esa sensación de
saberse queridos por alguien, de saber que tienen a alguien a su lado
con el que pueden contar y pocos logran tener un interés realmente
genuino por la otra persona.
Hay que recordar que para tener una
buena relación con alguien, se debe de tener también una buena
relación con uno mismo.
Si no sabemos tener una buena relación
con nosotros mismos, muy difícil podremos tenerla con los demás.
Sobre todo en este caso que no nos
damos la oportunidad de tener ese espacio para nosotros mismos y lo
llenamos con otro tipo de distracciones comenzando una nueva
relación.
Lo ideal es darse tiempo y la
oportunidad de arreglar cuentas con uno mismo, de sentirnos bien
estando sin pareja y a partir de nuestra propia capacidad de elegir,
podamos elegir pareja por convicción propia y no solo por necesidad.
¿Cuántas parejas siguen juntas
únicamente por necesidad?, ¿cuántas personas siguen eligiendo una
y otra vez a las personas equivocadas solamente para no estar solas?
Es importante ser conscientes que si
se sigue eligiendo a la pareja por necesidad, irónicamente más que
ayudarnos a sentirnos bien con nosotros mismos al cubrir esa
necesidad aparentemente, provoca que el vacío emocional se vaya
haciendo más grande.
Gracias por quedarte hasta el final de
este post, espero que haya podido aportar algo positivo a tu vida y/o
te haya sido de utilidad. ¡Hasta la próxima!
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